Negrito cobrá, cobrá. Negrito cobrá cobrá...
Por Satelito (J. C. Araneda)
Por fin cobraron. Hablo de goles, de resultados, de números positivos en su estadística mundialera. No vaya a pensar que hablo de dinero. Para eso hay que remontarse al fútbol chileno nada más. Pero estos tipos me caían bien. Porque se enfrentaron a un tricampeón del mundo y lo tuvieron a un arco en la jornada anterior aún siendo debutantes. Cuando algunos presagian que el fútbol del futuro es el que viene desde África es definitivamente por equipos como Ghana.
Hoy día desnudaron lo que ya les mencioné antes. Que la República Checa, aún siendo un gran combinado posee ciertos límites autoimpuestos por la pizarra de Karel Bruckner. Mucha dependencia de Koller y Baros (que aún no debuta) para aprovechar las arremetidas de Poborsky, Nedved o Rosicky. Es un vendaval de nombres pero que en la cancha se vueleve contrarestable. Ni hablar de ahora que no cuentan con sus dos atacantes titulares y llamados a ser figuras del mundial. No son un equipo con poderío de gol al que temer.
Asamoah Gyan quedó en la historia de esta copa del mundo al anotar el gol más rápido. Estuvo incluso a punto de convertirse en uno de los atntos artilleros del torneo pero falló increíblemente un penal. Las Estrellas Negras, como los llaman, aplicaron la técnica perfecta. Cuando resulta, es infalible. Comenzaron anotando de entrada y luego se dedicaron a entregarle la cancha y el dominio a un rival irresoluto en el área, que dominó y dominó las acciones pero no logró concretarlas en el global. Dónde importa.
Mejor aún. Ghana tuvo momentos en que pudo liquidar el partido a su favor con un dos a cero pero materializó su hazaña a ocho minutos del término con el contragolpe finiquitado brillantemente por Sulley Muntari.
Si el fútbol se ganara por puntos como en el boxeo o si importara la tenencia estadística del balón cuyo recuadro de conteo siempre aparece en pantalla los checos habrían merecido mayor suerte. Pero lo de hoy en Colonia fue justo premio a un equipo que llego a este mundial a tratar de conseguir algo, a no venir de simple invitado. Su tremenda entrega en la cancha tuvo por fin sus frutos contra el rival que era menos esperable. Y de paso dejó abierto un grupo que ya antes había descrito en este mismo sitio como el verdadero "de la muerte". Así no más era.
Por fin cobraron. Hablo de goles, de resultados, de números positivos en su estadística mundialera. No vaya a pensar que hablo de dinero. Para eso hay que remontarse al fútbol chileno nada más. Pero estos tipos me caían bien. Porque se enfrentaron a un tricampeón del mundo y lo tuvieron a un arco en la jornada anterior aún siendo debutantes. Cuando algunos presagian que el fútbol del futuro es el que viene desde África es definitivamente por equipos como Ghana.
Hoy día desnudaron lo que ya les mencioné antes. Que la República Checa, aún siendo un gran combinado posee ciertos límites autoimpuestos por la pizarra de Karel Bruckner. Mucha dependencia de Koller y Baros (que aún no debuta) para aprovechar las arremetidas de Poborsky, Nedved o Rosicky. Es un vendaval de nombres pero que en la cancha se vueleve contrarestable. Ni hablar de ahora que no cuentan con sus dos atacantes titulares y llamados a ser figuras del mundial. No son un equipo con poderío de gol al que temer.
Asamoah Gyan quedó en la historia de esta copa del mundo al anotar el gol más rápido. Estuvo incluso a punto de convertirse en uno de los atntos artilleros del torneo pero falló increíblemente un penal. Las Estrellas Negras, como los llaman, aplicaron la técnica perfecta. Cuando resulta, es infalible. Comenzaron anotando de entrada y luego se dedicaron a entregarle la cancha y el dominio a un rival irresoluto en el área, que dominó y dominó las acciones pero no logró concretarlas en el global. Dónde importa.
Mejor aún. Ghana tuvo momentos en que pudo liquidar el partido a su favor con un dos a cero pero materializó su hazaña a ocho minutos del término con el contragolpe finiquitado brillantemente por Sulley Muntari.
Si el fútbol se ganara por puntos como en el boxeo o si importara la tenencia estadística del balón cuyo recuadro de conteo siempre aparece en pantalla los checos habrían merecido mayor suerte. Pero lo de hoy en Colonia fue justo premio a un equipo que llego a este mundial a tratar de conseguir algo, a no venir de simple invitado. Su tremenda entrega en la cancha tuvo por fin sus frutos contra el rival que era menos esperable. Y de paso dejó abierto un grupo que ya antes había descrito en este mismo sitio como el verdadero "de la muerte". Así no más era.
5 Comments:
Si hombre, si. Si tú siempre tienes razón. Tanta cosa con que le achuntamos y le achuntamos y le achuntamos.
Te quedaste con todas las mañas del Pinto parece.
Me gusta eel equipo checo pero no como para llegar alto, en la Eurocopa, Grecia los maniató y los dejó fuera cuando dominaron todo el partido
a mi me gustaba mucho republica checa, asi q este resultado me tiene un poco depre, pero debo asumir q ghana jugo bien.... ahora solo me queda esperar hasta el jueves, dia en el q definira este grupo y que yo podre ver!!!
Los checos son puro invento de Ocares. No pacha na' con estos
Jajajaja, esa canción se la canta mi vieja al gato negro, al "Pitutín"
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