Pisaron fuerte

Por El Fanatinche

Comenzó el alicaído torneo nacional. Aunque el formato sigue siendo el más malo de la historia, hay que reconocer que algunas figuras de renombre y la suma de varios equipos a la pelea nominal por el campeonato hace de este un apertura interesante, motivador y aliciente. Por más que los problemas de Deportes Concepción nos hayan tenido en vela las últimas semanas, debemos reconocer que su participación nos dará la oportunidad de ver en Collao a sustanciales competidores intentando rememorar las campañas de la década pasada, con notables planteles y rendimientos elevados.
De los favoritos de siempre, en este fin de semana Universidad de Chile y Colo Colo dieron el primer paso con solido andar. Mientras los azules sacaron mínima ventaja (gol de Salas) en el Nacional a costa de una remozada Unión Española, los albos llevaron su ilusión renacida hasta la ciudad histórica, Rancagua, dando cuenta de O’higgins con un show encabezado por Humberto Suazo y José Luis Jerez. Los albos pueden y deben ser protagonistas del medio local este año.
Suerte dispar encontró el campeón vigente, al que no le bastó con rearmar su columna vertebral del año pasado para enfrentarse al crecido Everton de Marcelo Espina. Cayó demostrando además que los planteles tienen ciclos y que pedirle a la Católica mantener el nivel con que terminó levantando el trofeo de campeón el año pasado es desestimable para un fútbol tan vacilante como el nuestro.
Notable lo de Audax que fue a derrotar a Puerto Montt en la belleza del sintético césped del Chinquihue. También lo de Palestino que dio cuenta claramente de Wanderers. Otros sumaron sin entusiasmar lo suficiente: Santiago Morning, Huachipato y Cobreloa, que sin embargo contarán con el incentivo de iniciar un torneo sumando de a tres y con la confianza a tope tras superar a Rangers, Antofagasta y Cobresal respectivamente. Mejor fue para la Universidad de Concepción que para Coquimbo la paridad en el Sánchez Rumoroso.
Es recién una fecha. No sirve dar pálpitos a esta altura, pero sabemos que la pelea va a estar entre los grandes. No me pregunten por qué. Es cosa de mirar las estadísticas de estos torneos cortos y la respuesta cae por sí sola. Son los que hacen prevalecer su mayor plantel y sus nombres consagrados en un molde de justa donde todo se define en play offs. Pero a diferencia de otros años, algunos de los que se reforzaron concientemente (como Unión, Everton, Huachipato u O’Higgins) podrán amenazar la opción de los candidatos de siempre.
Habrá que poner atención a elementos locales como Humberto Suazo, Esteban Paredes, Alexis Sánchez, Hector Mancilla, Juan Gonzalo Lorca, Carlos Villanueva, Rodrigo Toloza o Alvaro Sarabia que serán dura competencia para otros experimentados como Marcelo Salas, Fabián Estay, Cristián Montecinos, Marcelo Corrales o José Luis Sierra en la consagración de los mejores de 2006. A ellos, debemos apuntar la contratación de jugadores extranjeros de renombre como Jorge Quinteros, José María Buljubasic y Dario Conca (UC), Celso Ayala y Andrés Gonzalez (Colo Colo), Leo Fernández y Mayer Candelo (Universidad de Chile), José Carlos Fernández (Palestino), Julio Cesar Gaona (Unión Epañola), Mariano Messera (O’Higgins), Miguel Angel Romero (Audax), Nicolás Ascensio (Cobreloa) o Leonardo Mas (Huachipato) entre los probables protagonistas del campeonato.
Por ahora nos frotamos las manos pues parece que la crisis está amainando y hay algo de luz al final del túnel.