Te lloré todo un River...

Por El Fanatinche (Ricardo Pinto N.)

Estos no eran costarricenses. Menos los de Gimnasia y Esgrima tras recibir siete en un clásico histórico. Al frente estaba River Plate, en contra alineaban el Tecla Farías, Fernando Beluschi, Eduardo Tuzzio o el "Chapa" Zapata. Nombres que si bien no representan alcurnia futbolera, le bastaron a un experimentado entrenador para maniatar al que, según la táctica, había que ensalzar como un difícil rival. Porque digámoslo. River le pasó la presión a Colo Colo y hoy jugó con la ansiedad blanca en sus propias narices.
No se complicó Passarella y paró dos líneas de cuatro. La idea era rotar mucho el balón, doblar marca cuando tuviera el balón el rival y achicar espacios y campo en general, para dejar a Colo Colo sin ideas, sin libreto, ni variantes ni opciones de juego asociado. El Millonario planteó el partido bien lejos de su arco y eso le bastó para mantener casi sin trabajo a Carrizo. Y partió a Núñez tras el partido tal como llegó
a Pudahuel. Con la cara llena de risa. Borghi por su parte, demostró que sigue siendo un entrenador valiente pero que depende de ciertas individualidades. Hoy no funcionó Sánchez y Colo Colo dejó de ser peligroso. No anduvo Meléndez y los hilos del encuentro los manejó Beluschi. Irreconocible la zaga en momentos claves y hasta el Negro Rivas -que jugador más "del montón"- se metió entremedio para complicarles la existencia y propiciar el tiro de gracia por obra de Farías. Colo Colo, para muchos, fue un oasis irreconocible y distante al del año pasado.
Las malas noticias es que este Colo Colo es exactmente el mismo que llegó a la final de la Sudamericana sólo eliminando en el camino a un rival de mediano peso, el Toluca de Ruben Gallego. Anoche se enfrentaron ante una camiseta "clásica" y un mero sistema, ni siquiera un plantel de gran fuste. Y les ganaron sin apelación.
Les quedó trabajo pendiente para lo que queda de torneo, mucho más accesible en cuanto a rivales, claro está. ¿O acaso se les acabó la racha? Porque digamos que en el fútbol, absolutamente todos los grandes equipos surgen del trabajo, de los preocesos, de las planificaciones y duran lo que duran: Una racha. Por lo que vi por el televisor, a Colo Colo se le están acabando los días felices.