A lo Cacique

Por Futbolero Mayor (Hugo Merino N.)

Media Copa Sudamericana en el bolsillo. Empatando cero a cero, Colo Colo es otra vez el dueño de Ámerica. Esta vez costó más de lo que nos tenía acostumbrado. Sufriendo pero con espíritu guerrero y estrategia de sabio. Así lo planificó Borghi y así lo enfrentó hoy. Atacando al rival cuando había que hacerlo. Poniendo lo otro cuando había que defender.
Esta era una final internacional y casi siempre, las finales se defienen por errores o aciertos. El equipo chileno tuvo un acierto cuando debía y el mexicano otro en su momento de dominio. Así se escribió el uno a uno.
Si analizamos la estrategia alba veremos que estaba clara desde que salieron a buscar el título desde Santiago hacia tierras mexicanas. De alguna forma, Borghi sabía que el partido final era distinto al de Toluca. Sin embargo, la gran clave es que Colo Colo sale definir los encuentros desde el comienzo, algo extraño para los equipos nacionales. Esta vez no resultó aunque las posibilidades las crearon.
Por primera sufrimos. Cuando Chitiva acierta el contragolpe del Pachuca y el Estadio Martín Hidalgo se vino abajo uno recordó fantasmas el pasado. Sentía que los goles perdidos en el arco de Calero se revertían y el Cacique tendría que asumir la gran interrogante de esta Sudamericana 2006. Cómo enfrentar los partidos con el marcador en contra.
Lo hizo bien. Aguantó y se concentró en dejar que el contrario asumiera el riesgo. Le entregó el bastión de mando y se dedicó a esperar su desgaste confiando siempre en los ataques fulminantes cuando hay espacios para hacer daño. Tuvo la regularidad de Cejas (que sacó un mano a mano sólo con Cacho que cambiaba todo el panorama), la tranquilidad de Henríquez y del colombiano González más todo el arrojo de Arturo Vidal. Allí sustentó el equilibrio.
Hasta que la norma se impuso por letra. Sánchez, (el Barticcioto de este equipo) sacó una jugada de gran nivel y Suazo mató como nunca dejó de hacerlo desde que recuperó el rumbo del goleador. Allí se acabó el Pachuca. Dejó de ser peligroso y sólo llegó con la media distancia y los ollazos. Pero ese tanto los mató en cancha.
No anduvieron tan bien Sanhueza con Meléndez, o mejor dicho no brillaron. Matías Fernández apenas apareció. Aún asi bastó. Queda lo que apreciamos más simple. Justo cuando la motivación es inmensa para el grupo dirigido por el "Bichi". Tengo toda la impresión que Pachuca le tenía demasiado respeto al cuadro chileno. Lamentablemente para ellos, cuando se dieron cuenta, el albo ya les había tomado el pulso.
Este 13 de diciembre puede ser histórico. Debe serlo. Colo Colo no pierde hace mucho rato, juega con total control de sus opciones, parece dominar la ansiedad, el favoritismo y el peso de su historia copera y lo que es mejor, aprovecha cada ocasión que se le presenta. Justamente, a este grupo ahora se le avecina la mejor oportunidad de su carrera futbolística. Yo no creo que la desaprovechen.