Quiénes son estos

Por Satelito (J. C. Araneda)

Andan todos locos con esto de Colo Colo en la Sudamericana. Ya está claro con quien juega la final. Con quien quería Borghi. Para que el grito de seguro campeón comience a graduarse, el Pachuca mexicano hoy se dio el gusto de florearse frente a un cuadro brasileño, desterrando de paso eso que las semifinales son cerradas, que darle vuelta el partido a un equipo carioca es casi imposible y que su real condición es subdimensionada por todo el continente. Estos son buenos, Hace rato ganan de local y hoy le pintaron la cara al Atlético Paranaense en apenas 45 minutos y cuando perdían uno a cero de local. Es más, ganaron los dos partidos.
Pero quiénes son. Perteneciente al grupo económico Pachuca (que controla además al club Indios de la llamada Primera A mexicana) es el último campeón del fútbol azteca. Juegan en el Estadio Hidalgo de Ciudad de México y poseen una de las hinchadas más apasionadas y bullangueras del país del norte.

Futbolísticamente son un equipo con un fútbol pragmático, directo, de mucho desborde por las bandas y con un jugador que es la clave de todo el funcionamiento para el técnico Enrique Meza: el volante argentino Christian Jiménez, que sin ser Matías Fernández, está pasando por su mejor momento y hoy fue quien comenzó a sepultar las opciones brasileñas con los dos primeros goles tuzos. Desequilibrante, con buen remate de pelota detenida y complemento ideal de los delanteros movedizos del equipo, Jiménez será la pieza clave para que Borghi pueda controlar los embates de un equipo mexicano que llega confiado. Seguramente le tendrán algo de respeto al Cacique pero cuidado con la visión chilena del asunto, con mirar en menos a este equipo que adormece los partidos y cuando tiene que explotarlos lo hace en pequeños lapsus de tiempo.

Tiene jugadores que son su columna vertebral, son importantes y pueden marcar la diferencia o equilibrarla ante un Colo Colo tan sólido. El portero Miguel Calero es uno de los mejores del continente y hoy atraviesa tan buen momento que ya dejó en la banca de su selección a otros grandes y vigentes como Córdova o Mondragón.

En la línea defensiva, el pilar es Aquivaldo Mosquera, en la mitad se acompañan con gran trajín los volantes Andrés Chitiva y Gabriel Caballero (que hace varias temporadas destaca en el competitivo torneo azteca) dejando un poco más adelantado a Jiménez, que de todas maneras es quien maneja el cuadro. Arriba, los imparables arranques del alero Damián Álvarez (ex compañero del Ámerica con Reinaldo Navia y que le anotó a Paranaense en Curitiba) y al centroatacante Juan Carlos Cacho, ex goleador del Cruz Azul que actúa más como hombre de área, aunque tampoco le incomoda asumir roles ofensivos en solitario y al sacrificio.

A no confiarse. Pachuca está invicto de local, como visitante liquidó casi todas las llaves ganándole a Lanus en Buenos Aires por tres a cero y al ya mencionado Paranaense por la mínima en Curitiba. Son peligrosos, llegan con este trío ofensivo muy bien armado y sustentan su juego en la presión y el anestesiamiento del fútbol en la mitad del campo para luego matar de contra. Atacan con pocos pero son muy efectivos. Sin ser un destello futbolero, yo que Borghi pondría cuidado. Y yo que la prensa nacional, dejaría tanto alboroto desaforado. Miren que de tanto café más dulce y de tanta marraqueta más sabrosa, no vaya a ser que en la puerta del horno se queme el pan.