Día de entrenamiento

Por Futbolero Mayor (Hugo Merino N)

Tal como el título de aquella película de Denzel Washington. Colo Colo tuvo una jornada memorable con goles, fútbol de gran nivel y un conductor iluminado que se convierte en el émbolo para que las piezas funcionen a la prefeción.

En ese rol de director de orquesta, Matías Fernández fue nuevamente un motor incombustible. Puso el primer y cuarto gol (el arquero costaricense era tan mediocre que ni siquiera vio videos de que "El Mati" pateaba los penales al centro), dirigió las jugadas con precisión y aprovechó el buen momento de Jerez y Suazo para generar fútbol ofensivo sin mucha oposición del oponente.

Quedamos contentos porque Colo Colo mostró que tiene calidad suficiente para buscar las diferentes alternativas que lo conduzcan al gol. Súmele el gran momento de Sanhueza y ya estamos aumentando los bonos. Además, pusimos ver en cancha nuevamente al "Maravilla" Sánchez que en algunos minutos demostró que tiene calidad sobrante.

La revancha del 10 será un mero trámite porque la Liga Deportiva Alajualense demostró que hay algunos equipos que irremediablemente terminan siendo "conejillo de Indias" para esta competencia. Si miramos que el esquema y funcionamiento de Colo es ya un trámite y que vienen partidos importantes para los seleccionados albos en "La Roja", sería bueno que Borghi y Saavedra comiencen a planificar una dosificación de sus figuras de cara a la próxima ronda.

Es cierto que Jorquera no es Fernández pero será un número puesto en selecciones y portadas del futuro próximo. Es bueno darle espacio a jugadores que vienen reapareciendo como el mismo Sánchez y Cáceres en ofensiva. Aprovechar que hay cuatro centrales para dejar dos en el refresco del descanso.

Tenemos equipo en la próxima fase. Les guste o no a algunos, Colo Colo esta sacando la cara por el fútbol chileno. Quien dice que con esto de las nuevas elecciones en la ANFP, el retiro de Reinaldo Sánchez, la nueva generación que se vislumbra en la selección y el incremento del nivel en la competencia interna que cada día se vuelve más pareja, esto del Cacique no es más que un anticipo de los augurados nuevos tiempos del balompié criollo.