¿Que te pasó Samuelito?

Por Satelito

Samuel Eto'o generó una inusitada controversia cuando anunciaba su afán de abandonar al Barcelona por cerca de un mes y enrolarse a su selección que por estos días jugaba la Copa de África. Varios despotricaron contra la rebelde decisión de este camerunés que, aún con rabia por ser eliminado a última hora del próximo mundial de Alemania, sacrificó logros importantes en la tienda catalana para ir por el principal torneo del continente negro.
Uno de los grandes ausentes de la cita mundialera en tierras bavarias será precisamente Camerún. Un equipo de muchísimo despliegue, de embates veloces y muchísima finura técnica en el toque de balón. Dada la gran cantidad de inmigrantes que viven en Francia, el canal de cable TV5 Monde estaba transmitiendo para todo el mundo y en directo los partidos de la Copa África jugada en Egipto para mi absoluto regocijo.

Esta vez, el choque era uno de los duelos soñados por variados ingredientes. Costa de Marfil enfrentaba a los cameruneses de Eto'o por un cupo en semifinales. El choque de las dos selecciones que lucharon un lugar para Alemania 2006 y que finalmente obtuvieron los marfileños gracias a un inesperado empate de los Leones Indomables como local y en la última fecha.
Era también un verdadero choque de estrellas. Si Camerún tiene a Eto'o como punta de lanza, en Costa de Marfil lucen entre sus varias figuras al goleador del Chelsea, Didier Brogba. Los mismos que reeditarán la antagonía en la esperada revancha del campeón inglés frente al catalán en la UEFA Champions League(Chelsea eliminó a Barcelona el año pasado y en la misma fase). Un verdadero clásico de fútbol de moda revisteril y mediático.
Empataron a cero, fueron a alargue y alli, con goles de Kone (para Costa de Marfil) y Meyong Ze (para Camerún) igualaron a 1. Llegaron a los penales y vino la historia difícil de repetir. La que quedará en los anales de la estadística. Con los primeros aciertos de Eto'o y Drogba se inició una sesión impecable de once anotaciones por lado desde los doce pasos. Increíble, pero cierto.
Entonces, ante la incredulidad de todo el público presente en el hermoso estadio de El Cairo y echando mano a la aplicación de una norma nunca antes vista (por más contemplada que esté) se ordenó repetir la serie. Samuel Eto'o tomó el balón, canchereó como siempre y de manera impresentable mandó el balón a las nubes. Dicho y hecho. Drogba anotó el suyo y Costa de Marfil otra vez dejó fuera a Camerún clasificándose para un nuevo desafió con olor a clásico. Contra Nigeria y por semifinales.
No será que Eto'o deberá conformarse con ver como su rival de siempre lo deja con la celebración en la punta de la lengua. Lo claro es que el destino nuevamente le jugó una mala pasada al camerunés, que por más estrella que sea, ha debido resignarse más veces de las que el público cree y lamentablemente, de las que él mismo quisiera contar en su carrera...